21 de noviembre de 2024

La economía durante el último trimestre del año tuvo un desplome de 0.1%, confirmando el freno a la recuperación económica, pero también, siendo el segundo en caer de manera consecutiva -el tercero cayó en 0.4%-, por lo que se habla de una recesión técnica.

El dato fue revelado esta mañana de lunes por el INEGI, revelando que el daño más fuerte para el PIB fue en el sector terciario o de servicios, el cual tuvo una caída de 0.7%, en tanto que el primario y secundario -o agropecuario e industria- mostraron una variación positiva de 0.3 y 0.4%, respectivamente, frente al tercer trimestre de 2021, confirmando un estancamiento generalizado.

El hecho de que el sector terciario sea el que arrastra con más fuerza la caída del PIB genera preocupaciones, ya que es el reflejo de la demanda interna. Además, estas actividades económicas suman caída en 8 de los 11 meses del año.

En contraste con el cuarto trimestre de 2020, el Producto Interno Bruto (PIB) en esa última ruta mostró un avance de 1%, lo que se explica por la baja tasa de comparación, de acuerdo con los datos del instituto.

De acuerdo con especialistas, la caída del PIB entre los meses de octubre y diciembre de 2021 se explican por factores internos como la cautela ante el inicio de la cuarta ola de Covid-19, los efectos de la reforma de outsourcing, la incertidumbre en el país ante algunas iniciativas, como la eléctrica; así como por externos, como la alta inflación, las disrupciones en las cadenas de suministro y el fin de los estímulos en Estados Unidos.

Con estos datos, Gabriela Siller, directora de Banco Base, considera que la economía mexicana «cayó en el llamado double dip o recuperación en forma de ‘W’. Además, es altamente probable que dada la segunda caída trimestral en el PIB se haya vivido una recesión en México». Una perspectiva que también comparten otras instituciones como el Bank of América.

Así, en todo el año, el cálculo del Inegi es que la economía tuvo un crecimiento de 5%, en línea con los últimos ajustes que realizaron instituciones financieras y expertos del sector privado desde la caída que ya se observaba en el tercer trimestre y profundizada en el cuarto, quedando muy lejos la estimación del gobierno que esperaba una recuperación por rebote de 6%. Este dato será confirmado el próximo 25 de febrero.

El dato también pone en evidencia los retos para este año, pues las presiones para el fin del 2021 no se disipan para el inicio de éste, como es la inflación afectada por choques de oferta, los crecientes precios de energéticos a nivel internacional y una demanda interna más débil. En ese contexto, Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda, reconoció que la actividad económica seguirá «limitada» por estos persistentes choques.

De acuerdo con el consenso del mercado, la economía al cierre del 2022 no alcanzará el 3%. El recorte más reciente provino del Fondo Monetario Internacional (FMI) que pasó de una estimación de 4.4% -alineado con la proyección actual del Hacienda- al 2.8%.

En este sentido, en un reporte de análisis de Grupo Financiero Monex advierte, en una lectura ampliada, que la crisis actual ya lleva una extensión de 9 trimestres: «aunque el desplome por el Covid-19 se dio en el segundo trimestre de 2020, la actividad había empezado a contraerse dos trimestres antes», por lo que considera que es la más larga en la historia reciente.

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