Ons Jabeur es uno de los casos exitosos del trabajo en uno de los centros regionales de la ITF, en conjunto con la Confederación Africana de Tenis. Jabeur fue vista por primera vez por el tunecino Hichem Riani, CEO de la asociación regional, a los 11 años, en Sousse, su ciudad natal. Él la animó a mudarse a Túnez, la capital del país, donde pudo combinar sus estudios con su desarrollo deportivo.
Entre 2009 y 2013 tuvo becas de viaje y fue una de las primeras que recibió una beca de jugador de Grand Slam en 2017.
Todo ese apoyo dio frutos, y en 2021 se convirtió en la primera tenista árabe en alcanzar los cuartos de final en Wimbledon, desde 1974. Un año más tarde, en Wimbledon 2022 fue la primera jugadora africana árabe que alcanzó una final de Grand Slam. Después llegó a la final del Abierto de Estados Unidos y este año repitió como finalista en Wimbledon.
El título se le ha negado, pero sabe que llegará “cuando esté destinado”.
Su fama de ser una de las jugadoras más carismáticas en el circuito es totalmente justificada. Una sonrisa abierta y un carácter afable la convierten en un modelo a seguir.
Además del tenis, a la tunecina le gusta el futbol. Es seguidora del Real Madrid y recientemente se convirtió en socia minoritaria del North Caroline Courage, club de la National Women’s Soccer League, que ganó títulos las temporadas 2018 y 2019.
Como deportista reconocida a nivel mundial, la tunecina está convencida de que el deporte le ha enseñado muchas cosas y la ha hecho ser esa persona a la que muchos admiran. Para ella el deporte, además de su profesión, es un medio para promover la paz en el mundo. “Siempre he creído que los deportes pueden traer paz. El tenis me hizo aprender muchas cosas. Soy una persona responsable, trato de ser amable con los demás. Igualmente los deportes podrían unir a las personas, estén luchando o no, y eso hace un mundo mejor, seguro. El hecho de
que la gente se una para apoyar al mismo equipo, al mismo jugador, esto es algo grandioso”.
Ser la primera africana que se convierte en una figura del tenis es algo que ve como muy positivo. “No hay muchas jugadoras de mi país y es un gran reto, pero creo que alguien tiene que hacerlo desde el principio para mostrar que puedes liderar el camino y ser una de las grandes jugadoras. Obviamente ser de África me motiva a hacer un mejor trabajo y espero inspirar a otras africanas a llegar al tour”.
La derrota sufrida en la final de Wimbledon este año fue muy dolorosa, pero el aprendizaje que obtuvo fue significativo. “Perder fue muy doloroso, pero estoy agradecida de haber podido jugar tres finales de Grand Slam. Sé que mi tiempo llegará cuando esté destinado. Lo que aprendí de esa final es que necesito ser más yo misma, jugar más relajada y simplemente disfrutar el juego. A veces olvidamos cómo disfrutar jugar tenis y es algo que trato de recordarme todo el tiempo”.
Jabeur fue tres veces campeona junior africana, y también ayudó a Túnez a llegar a la final de la competencia Mundial de Tenis Junior y la Copa Junior Billie Jean King.
Es por eso que no duda en animar a los más jóvenes a seguir sus pasos. En el torneo de Wimbledon 2022 pasó tiempo asesorando a jóvenes jugadores africanos menores de 14 años.
Ons vive su primera experiencia en un torneo en México. Es la primera sembrada del Guadalajara Open AKRON, presentado por Santander y por ende, es vista como la favorita. Es su primera vez como cabeza de serie en un torneo WTA 1000. La misión es clara, seguir haciendo historia para Túnez.
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