Durante la emergencia sanitaria por el Covid-19, los fraudes por Internet se han incrementado 60 por ciento, señaló Elizabeth Melchor, coordinadora de Prevención de la Policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana local.
La especialista en este tipo de delitos explicó que la policía cibernética recibe al mes tres mil reportes en promedio.
Antes de la pandemia, el 25 por ciento del universo total de avisos correspondía a fraudes vía web; es decir, cerca de 750 casos.
Durante la emergencia sanitaria, el número de fraudes cibernéticos creció 60 puntos porcentuales, pues pasó de ocupar 25 por ciento a 40 por ciento de todos los reportes, lo que equivale aproximadamente a mil 200 casos al mes.
Una de las modalidades dentro de este delito que ha alertado a la Secretaría de Seguridad Ciudadana en los últimos días es el llamado phishing, el cual consiste en el robo de claves bancarias y datos personales a través de páginas de Internet falsas o de correos electrónicos, para que, con la promesa de ganar un premio o tener descuentos o promociones, los cibernautas proporcionen la información que se les solicita.
La servidora pública señaló que, en la pandemia, algunos cibercriminales explotan con mayor frecuencia herramientas tecnológicas, en este caso el Internet, para la creación tanto de sitios falsos como de correos electrónicos que contienen ligas que invitan a cibernautas a apuntar sus datos.
En estas direcciones también es común la publicidad engañosa, en la que ofrecen productos por debajo del precio de mercado y con atractivas modalidades de pago.
“Al engañar a los usuarios, tienen su información, ya sea su nombre completo, teléfono, dirección, etcétera. Posteriormente, esta información puede ser mal utilizada, ya sea desde una suplantación de identidad por temas de fraude o incluso hablamos de temas de acoso, extorsión y amenaza”, detalló, en entrevista con La Razón.
Señaló que, en el último año y medio, aparecieron varios sitios de Internet que ofrecían la venta de insumos médicos, mediante la suplantación de marcas de laboratorios y farmacias.
Los casos más graves fueron los ocurridos para la compra de tanques de oxígeno, insumo que requieren los enfermos de gravedad por Covid-19; se detectó varias personas defraudadas con montos superiores a los 50 mil pesos.
“Ofrecían desde guantes, caretas, pruebas Covid; incluso tuvimos un tema con la Secretaría de Salud, en el que suplantaron el sitio oficial y estaban tratando de vender tanques de oxígeno”, recordó la servidora pública.
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