Luego de que Rosario Robles insistiera que su caso se trata de un caso de venganza, el Presidente López Obrador replicó que no es el caso, pues dijo que él no presentó ninguna denuncia en su contra, sino que es un caso que viene de tiempo atrás a su Gobierno.
«No tengo nada en contra de ella y es un asunto que atiende la fiscalía general de la república. Yo no odio a nadie. Yo soy feliz y no es mi fuente la venganza. Yo lucho por la justicia», afirmó esta mañana de martes al ser cuestionado sobre este caso.
El Presidente expuso, en su defensa, que él no fue quien interpuso la denuncia contra la exfuncionaria, sino que vino de tiempo atrás, recordando que el caso se desató tras la investigación de un caso de corrupción en universidades públicas conocida como La estafa Maestra.
Otra de las denuncias de Robles Berlanga es que hay un trato evidentemente diferenciado con Emilio Lozoya. En ese sentido también recalcó que es un tema que solo corresponde a la Fiscalía General de la República. «No me corresponde», dijo.
La ex secretaria de Desarrollo Social realizó un día antes fuertes declaraciones sobre su situación judicial. En una entrevista aseguró que se le pidió inculpar al expresidente Enrique Peña Nieto y el ex canciller Luis Videgaray a cambio de obtener beneficios en su proceso legal, ante lo cual aseguró se negó, pues dijo que son situaciones «absolutamente falsas».
«Ellos querían que yo firmara cualquier cosa para involucrar a otros y eso no lo voy a hacer, por eso me llamo Rosario Robles. Con todo y todo sigo teniendo mi dignidad, que es lo único que me queda», dijo Robles, reafirmando que su caso se trata de una venganza del mandatario.
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