En el día que han pasado dos meses desde el inicio de la guerra en Ucrania, Mariupol, ya casi completamente destruida, sigue siendo bombardeada, lo que obligó de nuevo a cancelar el corredor humanitario previsto para este fin de semana. En Kharkiv, la segunda ciudad más grande del país, Moscú atacó áreas residenciales.
La sensación de explosión demuestra que en Kharkiv los ataques no solo se dirigieron a los depósitos de armas. Rusia dice que golpeó objetivos militares con misiles de alta precisión.
Pero en la segunda ciudad más grande de Ucrania, hay informes de civiles golpeados y edificios de viviendas completamente destruidos.
El metro está sirviendo de refugio, mientras afuera continúan los bombardeos. El gobierno local habla de 700 civiles muertos, incluidos 40 niños, solo en la región de Kharkiv.
Mientras Kiev resiste, el este de Ucrania continúa siendo atacado. En Mariupol, el ejército ruso insiste en intentar apoderarse de la fábrica de Azovstal.
Naciones Unidas pide una tregua inmediata en Mariupol para la evacuación urgente de civiles. Unas 100.000 personas permanecen varadas en la ciudad.
En Odessa, los habitantes se unen a los equipos de rescate. La destrucción es el resultado de los ataques con misiles lanzados el sábado.
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