Al menos 201 personas han muerto en Irán a manos de las fuerzas de seguridad en las protestas iniciadas hace tres semanas, informó este miércoles la ONG Iran Human Rights (IHR), con sede en Oslo.

Las protestas en Irán estallaron tras la muerte de Mahsa Amini, que falleció el pasado mes en custodia policial, tras haber sido arrestada supuestamente por haber violado el estricto código de vestimenta que rige en el país. Según información obtenida por esta ONG, se han registrado muertos en 18 provincias, la mayoría en Sistán y Baluchistán (93 en total).

“La comunidad internacional debe prevenir más asesinatos en el Kurdistán dando una respuesta inmediata”, señaló el director de IHR, Mahmood Amiry-Moghaddam.

Los grupos de defensa de los derechos humanos también expresaron su preocupación el martes por el alcance de la represión en Sanandaj, la capital de la provincia del Kurdistán, en el oeste de Irán, de donde era oriunda Amini.

El IHR indicó que su investigación sobre el alcance de la “represión” en el Kurdistán iraní se había visto obstaculizada por las restricciones de internet y advirtió de una “inminente represión sangrienta” contra los manifestantes en esa provincia del oeste del país. “La ciudad de Sanandaj ha sido testigo de protestas generalizadas y de una sangrienta represión en los últimos tres días”, subrayó IHR, añadiendo que su cifra actual de muertos en la provincia excluía a los fallecidos en ese periodo.

El grupo dijo que las fuerzas de seguridad iraníes habían detenido a muchos niños que protestaban en las calles y en las escuelas en la última semana. Asimismo, IHR destacó que su cifra también excluía las seis muertes que supuestamente se produjeron durante las protestas dentro de la prisión central de Rasht, en el norte de Irán, el domingo, ya que todavía estaba investigando el caso.

 

Agregar comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *